Diario Libre.- Pedro Ureña Rib analiza con Diario Libre las características gastronómicas de la región del Caribe como parte del programa «Comer como un dominicano», tras participar en la tertulia «La historia y el patrimonio de la gastronomía caribeña«, realizada en el Centro León, a propósito de la exposición «El tiempo de todavía. Apuntes desde las artes visuales en el Caribe. 1984-2003″.
Eso es muy complejo. Lo primero que te puedo decir es que no en todas partes se habla y se come el concón de la misma manera.
Se come por todas partes frijoles, pero unos son negros y otros blancos, en un lugar le dicen habichuelas, en otro, frijoles y hay hasta quien lo denomina porotos…
Tenemos una gran cantidad de etnias y culturas que han intervenido en la República Dominicana y el Caribe. Aquí, en esta área caribeña, se fundó con tres grandes etnias: europea, africana e indígena, que, aunque desaparecieron, quedan usos y costumbres.
Pero luego, cuando se acabó la esclavitud, tuvimos que reemplazar la mano de obra y se trajeron chinos, hindúes y javaneses. Asimismo, cuando cayó el imperio turco en 1870, más o menos, recibimos sirios, palestinos y libaneses.
Todas esas gentes influyeron de una manera u otra en los hábitos culinarios. ¿Quién no se come un quipe en la República Dominicana?
Que vivimos en una misma área con las mismas características ecológicas, aire, mar, selva tropical y plantaciones. Esclavitud de campo y esclavitud doméstica.
Bueno, no voy a hablar de tal o cual plato, porque todas se mantienen. Según el país hay una valoración positiva o negativa de ello.
Aquí el bacalaíto se come en la calle, pero en otros países del Caribe es una delicatessen, o sea, algo muy elegante y muy fino que se brinda en los buffets.
La fritura y el chicharrón son platos que se comen en todos los países.
Extremo Oriente, Medio Oriente, África y Europa.
El Caribe sabe distinto según la región donde te encuentres. En una te va a saber a curry, que es de la India, Indonesia y el Extremo Oriental. En otro a cilantro y anís.
El arroz (responde Ureña Rib mientras ríe a carcajadas).
El sancocho aparece por todas partes, ya que es una comida de la esclavitud.
El gusto está en la variedad… usted no le va a pedir a un chino en Pekín que se coma un sancocho dominicano de Santiago. Además, el turismo está haciendo que se conozcan cada vez más estos elementos de la gastronomía de cada uno de los países.
Doctor en Letras y Lingüística de la Universidad de las Antillas y de la Guayana, cuenta con un diploma de la sección diplomática del Instituto Internacional de Administración Pública de París. Ha sido profesor, vicedecano y director del departamento de lenguas extranjeras de la Facultad de Humanidades en la Universidad Autónoma de Santo Domingo. Desde 1989 es profesor investigador en la Université des Antilles et de la Guyane en Martinica y en la Guayana francesa, donde ha desarrollado una profunda labor de investigación científica en lingüística y culturas caribeñas. Ha publicado numerosos artículos científicos e impartido conferencias en diversos países del Caribe, América Latina y Europa.
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